Ha pasado un DIA desde que me entere de la corta condena (de 15 a 20 años) que nuestro sistema impone a los canallas que siegan la vida de nuestras mujeres y niños, aquellos que en su cobardía no se atreven a mirar a la cara a alguien que les haga frente, yo lo pude comprobar en el juicio y ese asesino no tuvo valor a mirarme. Solo le pido a Dios que los años que cumpla sean tan amargos y angustiosos como los diez minutos que mi hermana paso cuando le quito la vida. Agradezco a todos mis familiares y amigos el apoyo demostrado en el transcurso del proceso. Y sobre todo a mi hermano.
LA CONCLUSION FINAL DEL PROCESO FUE QUE ROCIO ERA UN ANGEL